Qué significa ironía
La ironía, ese término que a veces llegamos a manejar de forma completamente natural, y que manifestamos, sin siquiera conocerlo debidamente. Un concepto que proviene de los más antiguos filósofos de la historia y que se ha ido aplicando en innumerables medios a lo largo de los años y los siglos por su eficacia y su contundencia.
Aquí vamos a explicarte qué significa exactamente la ironía, e incluso demostrarte por qué no tiene nada que ver con el sarcasmo, a pesar de la fuerte relación que tienen. Desgranaremos su significado al completo, viendo también los diferentes contextos en los que aparece y los usos que ha tenido durante todo este tiempo y en la actualidad.
En definitiva, si quieres aprenderlo todo sobre este término, tanto por lo que significa como por cómo se usa como recurso, te aconsejamos que sigas leyendo. Tenemos mucho que explicarte a continuación sobre esta palabra, y te adelantamos que te interesa mucho si quieres aprender a manejarla debidamente.
Definición de ironía
La ironía es un término que se utiliza para hablar de todo aquel acto en el que se trata de dar a entender justo lo contrario a lo que se está expresando, sea tanto de forma escrita como oral. Un recurso muy utilizado en la literatura e incluso en el teatro y que, por lo general, suele confundirse bastante con el sarcasmo.
De hecho, otra posible interpretación del concepto de ironía es aquella en la que se habla de ella como el arte de alguien para burlarse de algo, de criticarlo o incluso de realizar una denuncia sin expresarlo explícitamente. Es un mecanismo que busca jugar con el doble sentido para conseguir reforzar el impacto del mensaje que se desea transmitir.
Como última interpretación adicional, también se puede hablar de este término para hacer referencia a una situación en la que acaba sucediendo lo contrario a lo que se esperaba o se deseaba. Se dice que algo es irónico cuando pasa esto, sobre todo cuando es un agente que lleva la contraria a la propia naturaleza del acontecimiento.
Debido a esto, este recurso acaba convirtiéndose incluso en una postura con la que se puede llegar a enfatizar mucho más lo que realmente se quiere decir. Por eso, lleva siglos utilizándose tanto en la prosa como en la poesía, incluso en cualquier conversación normal en el día a día de cualquier persona.
Etimología. ¿De dónde proviene la palabra ironía?
La palabra “ironía” proviene del antiguo griego. El término exacto del que procede es “eironeia”, que se puede traducir como “preguntar algo fingiendo ignorancia” o, también, como “disimulo”.
Este vocablo no es puro, ya que proviene de otro término también griego. Más concretamente, su origen está en el verbo “eiro”, que se traduce como “yo digo”. Uno que a su vez está vinculado con la raíz indoeuropea del verbo hablar. Así pues, es un concepto mucho más antiguo de lo que se podría esperar.
Tipos de ironía
Aunque por su significado pueda parecer que solo existe un tipo único, lo cierto es que existen diferentes tipos de ironía si repasamos toda su trayectoria. Vamos a ver los principales:
Ironía cómica
La ironía cómica es la incongruencia que hay entre algo que sucede y las expectativas que había ante dicho acontecimiento. Una forma de romper con la aplicación de la lógica que, a veces, tiene lugar de forma totalmente inesperada y descontrolada.
Ironía socrática
Sócrates utilizaba la ironía como el acto de fingir desconocimiento para reforzar las acciones de un buen pensador. Un mecanismo utilizado también por Platón en sus discursos.
Ironía romana
En la Antigua Roma, la ironía era un recurso utilizado en conversaciones retóricas públicas, utilizando palabras con un significado opuesto a la intención con la que se empleaban.
Ironía literaria
La ironía literaria, más conocida como ironía trágica, es un recurso del género con el que se busca aumentar la intensidad de una situación que resulte dramática. Es algo que suele verse a través de un comportamiento inadecuado, como dos enemigos tratándose con camaradería. A veces puede llevar al malentendido.
Ironía verbal
Aquí, se habla de ironía como la acción de comparar un pasado negativo con un presente positivo. Una comparativa que busca contraponer situaciones para expresar algo.